No se pensar cuando se trata de amar, no se dejar pasar ese momento celestial.No puedo dejar pasar el momento de prodigar mis sentidos, y que mi arrepentimiento se refugie en otro corazón.No puedo rechazar el momento de escuchar los latidos que dictan la verdad, que estremecen sin interrumpir, y que nos trae como razón que tan solo nacimos para comprobar que son dos los que naufragan, en un mar de sosiego.Donde el sol ilumina nuestros instantes de afinación, y despoja su luz cuando nos encoláramos sin discernimiento, sin autenticidad.Y se muestra protegido al desentendernos del dolor. Y ponemos en cambio sentimientos que nos traen anhelos y noción.Si, estamos aferrados a un mundo desenfrenado, donde somos dos espíritus sometidos a idolatrar la hermosa oportunidad que tenemos de amar.Sentimos un cansancio infinito que domina los sentidos y es el único cansancio que no nos hace sentir abatidos.Somos tú y yo, y esta unidad que nos desarma siempre que nos volvemos para vislumbrar la satisfacción de saber que estamos, que fuimos creados tan solo para amarnos.Si, solo tu y yo, y comprender que yo sin ti, no soy yo, y que tu sin mi no sientes calor, ese calor que nos hace andar entrelazados al caminar convencidos de que mañana, nos amaremos aun mas.
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